Gula del norte al ajillo

Este es un plato muy socorrido en los entrantes ahora en las comidas y cenas de navidad. Nosotros lo usamos a menudo y siempre de diferentes maneras. Al final es verdad que nunca falla.

Necesitas: 250 gr de gula del norte, aceite de oliva, 3 dientes de ajo y una guindilla.

Trocea la guindilla. Pon en una sartén aceite de oliva a fuego medio y los dientes de ajo laminados, según comienzan a dorarse un poco añade la gula del norte y la guindilla. Dan unas vueltas dos minutos en la sartén y sirve.

Algunas variaciones posibles:

- Con langostinos cocidos: Incorporar unos langostinos cocidos en el momento en el que echas la gula y presentar con un poco de perejil fresco picadito por encima.

- Con cebolla y champiñones: Freír antes unos champiñones frescos laminados con un poco de aceite de oliva, reservar cuando estén dorados. Freír en la misma sartén, con un poco de aceite de oliva, una cebolla picada y dejarla ponchadita. Añadir entonces los dientes de ajo picados y dorarlos. Entonces echar las gulas del norte y la guindilla. Dar unas vueltas, 2minutos, y servir.

Si no te gusta mucho el picante o no te sienta muy bien, la guindilla o la cayena que uses no la rompas, échala a freír igual y sácala al final para que no haya sorpresas luego.

Ensalada fresca de espinacas y mandarinas

Os dejo una receta de una ensalada fresquísima y original. Las naranjas y las mandarinas quedan muy bien combinadas con las hojas verdes en ensaladas. Yo las uso bastante. Aquí un ejemplo riquísimo.

Necesitamos: Una bolsa de espinacas frescas, unas hojas de menta fresca, dos mandarinas, queso curado, piñones, 2 endivias, aceite de oliva, vinagre de Módena, sal y pimienta.

Pon los piñones en una sartén unos minutos hasta que se doren un poco. Retíralos. Los añadiremos luego por encima a la ensalada.

Pon en tu ensaladera la bolsa de espinacas frescas, bien lavadas porque es fácil que tengan algo de tierra. Corta las endivias y añádelas. Corta las mandarinas en rodajas y utilízalas también para decorar esa fuente de verde. Echa los piñones y corta con ayuda del pelador unas lascas de queso manchego o un parmesano.

Aliña con un buen vinagre, aceite de oliva, sal y pimienta.

Carpacho de champiñones

Esta receta se la debo a mi tío Juan Antonio. Es un gran cocinero, uno de los mejores que he conocido, y a veces presenta cosas muy sencillas que resultan exquisitas.

Le he visto presentar este carpacho de champiñones con virutas de jamón, pero también sale muy rico con parmesano cortado en lascas.

Necesitas: medio kilo de champiñones frescos, un manojo de perejil fresco, sal y pimienta y un buen aceite de oliva.

Lava muy bien los champiñones, córtalos en laminas finas y ponlos en un plato con un limón escurrido por encima. Deja que se macere media hora.

Presenta en ese mismo plato con un buen chorro de aceite oliva, un poco de perejil fresco picadito por encima, un poco de sal y pimienta, y unos cortes de jamón o unas virutas de parmesano.

Puré de patatas como guarnición

Esta es una solución muy fácil para acompañar platos con carnes o pescados, y debe ir acompañado de unas verduras hervidas en su punto de cocción, como zanahoria, guisantes, coliflor, unas vainas de guisantes, judías verdes, etc.

Necesitas, para 4 platos: ½ Kg. de patatas, una cucharadita de mantequilla, pimienta, sal, medio vaso de leche.

Cuece las patatas troceadas, limpias y peladas, cubiertas de agua en una olla. Apártalas cuando estén hechas.

En un cazo derrite la mantequilla  a fuego lento y añade las patatas trituradas con el pasapurés, añade un poco de pimienta molida y sal, mezcla bien y ve añadiendo poco a poco la leche caliente hasta que removiendo veas que tu puré de patatas tiene la textura que quieres.

Sirve siempre caliente acompañando a tus platos.

Ñoquis de patata caseros

Quiero compartir con vosotros la receta de los ñoquis de patata que hicimos el otro día con un amigo italiano que acostumbraba a hacerlos con la receta antigua de su abuela. Merece la pena mucho probar a hacerlos. Un plan perfecto para un día de frio este invierno.

Ingredientes para 4 raciones: 1 kg de patatas, 200 g de harina, 200 gr de sémola de trigo fina, 2 huevos, sal.

Cocemos las patatas en abundante agua a fuego fuerte con sal. Pelamos las patatas cuando estén hechas, en caliente. Las pasamos entonces por un pasapurés y añadimos un pellizco generoso de sal y los huevos. Vamos añadiendo la harina y la sémola a partes iguales hasta que pueda amasarse con las manos fácilmente.

Para poder hacer todo esto cómodamente ten en cuenta que la mesa de trabajo debe estar enharinada, así no se irá pegando todo. La masa no debe estar muy dura, al contrario, blanda y fácilmente amasable.

Así pues la masa la divides en pedazos mas pequeños que te permitan ir haciendo tubillos luego con ayuda de las manos, bien enharinadas otra vez para poder trabajar la masa, de algo menos de 2 cm. de diámetro.

Vamos a ir cortando esos tubillos con ayuda de una espátula metálica de cocina o un tenedor, cada trozo (ñoqui) de 1,5 cm. Mas o menos.

Según los vayas cortando echa por encima un poco mas de sémola y muévelos, que se envuelvan en esta mezcla de harina y sémola que tienes encima de tu mesa de trabajo. Así no se pegaran otra vez al guardarlos o manejarlos.

Si los vas a comer en el momento están preparados para hervirlos: Cocemos en agua hirviendo con algo de sal, cuando suban a superficie los vamos sacando, esto serán unos dos minutos. Están listos.

Si los quieres congelar para tomar más adelante, algo que merece la pena porque una vez que te pringas de harina pues te pringas de verdad y puedes hacer más cantidad simplemente multiplicando por dos o tres las proporciones que te he dado, solo tienes que ponerlos en una bandeja plana en el congelador unas cuantas horas. Cuando estén congelados puedes pasarlos a una bolsa de congelar para más comodidad.

Servimos calientes con la salsa que queramos. Nosotros hoy le hemos puesto una salsa boloñesa que os explicare pronto. Los que he guardado los hare con una salsa de queso azul en una primera ocasión y con un pesto verde de albahaca casero en una segunda. Si quieres algo realmente sencillo y rico pon unas lascas de queso parmesano por encima, unas hojas de albahaca fresca bien cortadita y pimienta molida. Chorro de aceite de oliva y a disfrutar.

Guisantes al horno con jamón y huevos

Unos de los platos preferidos de mi amigo José María, es muy sencillo y barato, pero sorprende por su sabor y a los que nos gusta mojar la yema del huevo con un poco de pan nos alegra la comida. Un primero sano y consistente.

Necesitas, para 4 raciones: 500 gr. de guisantes, frescos o congelados, una lonche de jamón serrano de 200 gr. o el equivalente en  taquitos, una cebolla, 4 cucharadas de tomate frito, 4 huevos, aceite de oliva y sal.

Empieza picando la cebolla y poniéndola a pochar con un poco de aceite de oliva en una sartén grande. 

Mientras cuece los guisantes en un cazo con agua y un poco de sal por 15 minutos. Escúrrelos y añádelos a la cebolla cuando esta esté cambiando a marrón. Da unas vueltas en la sartén, 5 minutos,  que los guisantes se mezclen con la cebolla y se frían un poco, y añade entonces los taquitos de jamón. Dos minutos, no más para que no sale mucho. Aparta del fuego.

Coge 4 cacerolas individuales o una grande de horno. Reparte los guisantes con jamón y ánade una cucharada de tomate frito por encima. Rompe un huevo en lo alto y mete al horno a 180 grados hasta que la clara este hecha y la yema blandita. Que se pueda mojar.

Sirve con un poco de pan, la gracia del huevo no te la tengo que contar yo ahora…

En ausencia de jamón serrano los hemos hecho con jamón cocido y con salchichas de Frankfurt. Mismo método.

Patatas cocidas en el microondas

Es algo tan fácil que parece estúpido, pero es que tantas veces terminamos comiendo cualquier cosa por no cocinarnos que os tengo que recordar que nos podemos hacer recetas muy sencillas y nos permiten comer caliente y algo más sano.

Para cocer las patatas en el microondas solo necesitaras ponerlas enteras y lavadas en un plato y meterlas a intensidad máxima, o de cocinar, durante 10 minutos. Si alguna fuera muy grande igual necesita dos minutos más.

Pélalas al sacarlas y pártelas. Las tienes listas para tomar.

Un compañero del trabajo come esto todos los días. No exagero. Todos los días. Solo cambia la manera de presentar las patatas. Os dejo algunas que se me ocurren muy rápidas:

Con  unas lascas de queso y atún, con pimienta molida, sal y aceite de oliva.

Con ensalada: espinacas frescas, tomate natural, maíz y aceite y sal.

Con una lata de las famosas beans en salsa de tomate.

Con un par de huevos escalfados y un chorrito de limón, aceite y sal y pimienta.

Pasta con salmón y tomates secos

Otro plato de pasta sencillo y riquísimo. Para los que tenemos que comer en taper en una bendición poder tener un repertorio amplio de platos de pasta. Prepárala en 20 minutos y come caliente siempre que puedas.

 

Necesitas, para dos personas: 250 gr de pasta, 100 gr de salmón ahumado. Tomates secos (unos 10), 2 cucharadas de alcaparras, 1 cebolla, 1 diente de ajo, 1 cayena, pimienta, aceite de oliva, laurel y un poco de sal.

Calienta el aceite de oliva en una sartén y añade el ajo picadito y la cayena entera, sin partir. Añade la cebolla también al mismo tiempo y pocha todo. Cuando la cebolla esté un poquito marrón saca la cayena y añade el salmón troceado, los tomates secos cortados por la mitad, las alcaparras y un poco de pimienta. Mezcla todo bien.

Mientras has podido cocer la pasta en abundante agua con unas hojas de laurel, un poco de sal y un chorrito de aceite, El tiempo el que diga el fabricante en la bolsa.

Cuando la pasta esté hecha, escurre bien y echa tu mezcla por encima. Añade parmesano rallado y un poco de orégano. Sirve caliente.

Sopa fría de pepino

Os dejo una receta muy sencilla que puede refrescar más de un aperitivo el próximo verano.

Ingredientes: 2 pepinos grandes, ½  rama de apio, 1 yogur natural, sal, 1 vaso de agua, 1 pizca de pimentón dulce y 2 rebanadas de pan de molde.

Pela y trocea los pepinos y colócalos en una jarra. Agrega el apio limpio y la miga de pan, todo ello troceado junto con el yogur y el vaso de agua. Por último, añade el pimentón dulce, triturándolo todo muy bien con la batidora. Deja a tu punto de sal y sirve frío.

Puedes acompañar la sopa con unas rodajas finas de pepino y unas hojas de menta.

Ensalada griega de patata

Esta receta se la debo a mi amigo Clemente, un italiano Ex-chef de profesión, ahora escultor de hielo (quizá el más reconocido a nivel mundial) que la presento el otro día en una fiestecilla que hicimos en casa. Así os puede dar una buena idea en un caso parecido, pues tiene una salsa de yogurt griego y es mejor tomarla pronto.

Ingredientes: 1 Kg de patatas baby, 4 ramas de apio, 150 gr de maíz dulce, 6 salchichas de Frankfurt, un manojo de perejil, 250 ml de yogurt griego, 15 o 20 spring onions o en su defecto 1 cebolleta tierna, aceite de oliva, vinagre de jerez, sal.

Lava y corta en rodajas finas el apio, con las hojas y todo. Haz lo propio con los spring onions o la cebolleta en su defecto, ponlas en un bol y echa un buen chorro de vinagre de jerez para que se vayan cocinando un poco. Remueve de vez en cuando.
Mientras, cuece las patatas baby en agua y sal y cuando estén tiernas las apartas y las cortas en pedazos de bocado. Por supuesto puedes hacerlo con patatas normales, pero pierde encanto y será más difícil que controles el punto de cocción. Debes dejarlas enteras. No hace falta quitarles la piel. Solo lávalas bien antes de cocerlas.
 Da un golpe de cocción a las salchichas, 2 minutos en el agua hirviendo o bien 2 minutos de microondas.
Pon las patatas en una ensaladera y añade el maíz escurrido, el perejil muy picadito, el apio y la cebolla con el vinagre que mezclaste, las salchichas troceadas, un chorro de aceite de oliva y el yogurt griego. Pon a tu gusto de sal y añade un poco de pimienta blanca si te gusta ese toque.

Preséntala fresquita, veras que buena.

Crema de coliflor

Aprovechando que compramos hace unos días una coliflor inmensa y debía darle salida a media después de comer alguna hervida, me puse con la crema de coliflor. Una receta básica que hacemos en casa muchas veces con este y otro vegetales.

Sale muy buena, ahora en invierno es una solución buenísima a las cenas, y permite mantener durante unos días esa coliflor que ya se iba poniendo algo fea.

Necesitamos, para 4 raciones: media coliflor grande, media cebolla grande, una patata mediana, 4 quesitos, 1 litro de agua o de caldo de ave, un vaso de leche, 3 dientes de ajo, aceite de oliva, una cucharada pequeña de cominos, pimienta, sal.

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Ponemos aceite de oliva a calentar en la olla y ponemos a fuego lento los ajos enteros sin pelar, la cebolla troceada, la coliflor lavada y troceada y la patata troceada también. Dejamos unos 10 minutos moviendo de vez en cuando para que no se peguen y añadimos entonces el agua, la leche, el comino, la pimienta molida y un pellizco de sal. Dejamos cocer 20 minutos y añadimos los quesitos y dejamos otros 10 minutos.
Retiramos del fuego y trituramos con la batidora.

Para presentarlo tenemos innumerables posibilidades. A mí me gusta añadir un chorrito de aceite de oliva y unas virutas de jamón.  También admite hiervas provenzales, perejil u  orégano y parmesano rallado.

Truco: Yo añadí un cubo de concentrado de caldo de ave a hervir con el agua. No soy muy amigo de usar los concentrados, pero es cierto que facilita mucho el trabajo y da un poco más de sabor a esta crema. Si no quieres, no hace falta, sacarás más el sabor de la coliflor.

 

Dátiles con bacon al horno

Detalle a modo de picoteo para empezar una cena con los amigos. Riquísimos.

Necesitas: unos dátiles, el mismo número de almendras crudas, un poco de queso azul y unas lonchas de bacon ahumado.

Deshuesa los dátiles. Rellena ahora con una almendra cruda y un poco de queso azul. Envuelve cada uno en media loncha de bacon ahumado y ayúdate de un palillo para sujetar tu obra.

Mete al horno a 200 ºC hasta que veas que el bacon está crujiente.  Más o menos 20 minutos.

Cómo asar pimientos

He estado usando pimento rojo asado esta semana que hice una ensaladilla, y quiero comentar como asar estos pimientos rojos que tienen muchísimas salidas en la cocina. Yo hice algunos de más para preparar unos sándwiches esta semana. Facilísimos:

Ingredientes: pimientos rojos, agua y sal, aceite de oliva.

En una bandeja de horno colocamos los pimientos enteros untados con aceite y con algo de sal. Añadimos un chorrito de agua.

 Metemos al horno a 180º durante 20 minutos aproximadamente, sacamos y damos la vuelta a los pimientos, de manera que estén 20 minutos por cada lado. Esperamos que enfríen para pelarlos y quitar las pepitas

Ya tenemos unos pimientos asados riquísimos especiales para ensaladas o guarniciones de carnes.

Ensalada Griega

Ensalada fresca y muy rica. Te la recomiendo como entrante o primer plato, es muy ligera y gusta a todo el mundo.

Necesitas: 2 tomates, queso feta, aceitunas negras, 1 pepino, unas hojas de albahaca fresca, aceite de oliva, sal y pimienta.

Lava y parte los tomates, añade el queso feta en daditos, el pepino en rodajas y unas aceitunas negras. Pon unas hojas de albahaca por encima, escurre el medio limón, salpimienta y rocía con aceite de oliva.

Sangría

Animado por el éxito que tuvo ayer la sangría que presenté en una fiesta, os digo la receta que suelo usar y os animo a que la hagáis y ayudéis así a difundir una de las cosas que más gusta de España fuera de nuestras fronteras. La sangría.

Esta receta es para unos 2 litros, sin hielo, que vienen a durar nada y menos en una fiesta con ingleses.

Necesitas: 1 botella de vino tinto de 750 ml., 1 rama de canela, 1 naranja, 1 limón, 1 melocotón, 100 ml. de ginebra, 100 ml. de ron,  75 grs de azúcar, 1 litro de refresco de naranja.

Las proporciones son estas, dependiendo de las botellas de vino que prepares, así serán las cantidades.

Lava bien las frutas, corta en medias rodajas la naranja y el limón y pela el melocotón y parte en trocitos. Pon la fruta a macerar con el vino y el resto del alcohol, la rama de canela y el azúcar.  Déjalo un rato, un par de horas es perfecto. Echa el refresco de naranja y abundante hielo justo antes de servir y remueve bien.

Se puede variar la fruta a añadir, por supuesto. Y debe comerse luego, después de quedar borracha por el alcohol que empapa.  Quedan muy bien pera, manzana, nectarinas, cerezas, etc.

Hay muchas variaciones de la sangría, todas buenas. Ésta es la que yo hago. Puedes hacerla más o menos alcohólica según convenga, se puede añadir brandy, ponche o licor 43 para un toque dulce o puedes darle un sabor especial con un chorrito pequeño de licor de mora, fresa, melocotón, etc.

¿Quieres compartir la tuya?  

Habichuelas con chorizo

Pedazo de plato de cuchara el que presento hoy. Ya he dicho otras veces que hay comer legumbres, hoy lo que digo es que hay que probar este plato tan sencillo y rápido de hacer. No hará falta que os recuerde otra vez que comáis legumbres.

El chorizo para cocinar nosotros lo traemos de España, procurando que sea un ibérico bueno pero no muy fuerte. Que no nos dé la tarde luego en el trabajo. Se traen al vacío, como hacemos con el jamón, y duran varios meses.

Ingredientes: 1 cebolla, 1 tomate, 1 diente de ajo entero, 50 gr de chorizo para cocinar, 1 cucharada de pimentón, 3 hojas de laurel, 1 bote de habichuelas blancas cocidas, 2 patatas medianas, 3 huevos, 1 cucharada de colorante, y aceite de oliva y sal.

Pelamos y cortamos la cebolla muy picadita. Pelamos y rayamos el tomate. Pelamos el diente de ajo y cortamos el chorizo en taquitos o rodajas finas.

Ponemos en una olla el aceite de oliva a calentar y sofreímos primero la cebolla, damos unas vueltas y a los 5 minutos añadimos el tomate rayado, el diente de ajo y el chorizo, damos unas vueltas hasta que el tomate consuma el agua y está frito.

Añadimos entonces una cucharada de pimentón dulce y removemos para que no se queme, al minuto añadimos 1 litro de agua y el laurel.  Añadimos las patatas cortadas en trozos pequeños y el colorante y dejamos hervir a fuego lento 12 minutos, entonces añadimos las habichuelas de bote, que ya vienen cocidas. Corregimos de sal. Dejamos hervir 5 minutos y retiramos.

Hemos cocido mientras, en un cazo aparte, los 3 huevos hasta que queden duros.

Presentamos cada plato con su ración de habichuelas con chorizo correspondiente y un huevo laminado por encima, decorando. A disfrutar.

Ensalada de pasta con bacon y champiñones

Ensalada de pasta muy fresca y fácil de preparar. Especial para excursiones con mochila o nevera y para comer de taper en la empresa.

Necesitamos: por ración como plato único, 125 gr de pasta, 150 gr de champiñones frescos, 50 gr de bacon ahumado, unas aceitunas negras sin hueso, 50 gr de queso feta, unos tomates cherrys o medio tomate en su defecto. Orégano, aceite de oliva, sal y pimienta.

Hierve la pasta según tiempos del fabricante, a fuego fuerte con abundante agua y un chorrito de aceite y sal. Pásala por agua fría debajo del grifo que enfríe un poco. Escurre y pon en un bol grande para mezclar todos los ingredientes y remover fácilmente.

Limpia bien el champiñón freso y córtalo en laminas o en cuartos, según te guste más, fríe a fuego medio durante unos 8 minutos. Soltaran el agua, tírala y añade los champis a la pasta.

Ahora corta el bacon en tiras pequeñas y finas a fuego fuerte hasta que dore. Añádelo a la pasta.

Corta las aceitunas negras en cuartos, los tomates cherrys, bien lavados, en mitades y el queso feta en daditos pequeños.  ( si usaras tomate normal intenta cortarlo en daditos pequeños, que quede homogéneo todo) Añade a la pasta.

Echa aceita de oliva, abundante orégano y pimienta y un poco de sal (porque el bacon ya salará algo). Remueve bien y sirve a temperatura ambiente.

 

 

Sopa de pollo

Aquí se ha metido ya el frio y tenemos que empezar con recetas que le calienten a uno el cuerpo. Esta sopa de pollo casera como primer plato puede ser una buena solución.

Ingredientes para 4 raciones de sopa: 1 carcasa de pollo, 2 traseros de pollo, 1 puerro, 3 zanahorias, 1 cebolla, manojo pequeño de perejil, agua, sal, fideos de sopa, 2 huevos, 1 limón.

Pelamos y limpiamos todas las verduras. Hacemos lo mismo con la carne, y quitaremos las vísceras también. Echamos todo en una olla grande y cubrimos con agua. Cuando comience  a hervir ponemos el fuego bajo y cocinamos el caldo lentamente durante 1 hora y media.

Sacamos de la olla la carne y la verdura, las reservamos, y colamos el caldo.

Para desengrasarlo lo ideal es dejar que enfríe unas horas, la grasa quedara en superficie y se retira fácilmente con una cuchara. Si la hacéis para servir en ese momento quitad el poco que podáis igualmente.

Pon los dos huevos a cocer y apártalos cuando estén duros. Reserva.

De la verdura que has apartado, coge un poco de cada y tritura en la batidora. Añade esa pasta a la sopa y remueve. Ahora podemos calentar el caldo otra vez para cocer los fideos.

Cuando comience a hervir el caldo echamos el fideo y la sal, bajamos el fuego y cocemos hasta que se haga la pasta a nuestro gusto. Servimos inmediatamente  y acompañamos en la mesa con dos cuencos, en uno la carne del pollo desmigada, en el otro los huevos cocidos pelados y troceados.

Cada comensal debe echarse carne y huevo al gusto y un chorrillo de limón.

Sandwich de langostino cocido

Siguiendo con los sándwiches, que sé de alguno que es poco aficionado a encender los fuegos, os propongo éste con langostino cocido. Diferente a los anteriores y riquísimo.

Ingredientes: langostino cocido, huevo cocido, perejil picado, mayonesa, mostaza.

Después de ver los ingredientes ya el sándwich tiene poco misterio. Lo más importante, quizá, saber que un buen pan de molde hará mucho mejor el sándwich, no éste en particular, sino cualquiera que hagáis en general.

Yo uso casi siempre algún pan de molde integral con cereales y semillas. Y lo conservo en el frigorífico para que esté mejor.

ensalada de col o Coleslaw

Ensalada que he redescubierto aquí en Londres porque la presentan como acompañamiento en casi todos los pubs en cualquiera de sus platos. Al final le he cogido el gusto y me he propuesto hacerla en casa. Ahí va:

Necesitamos: una col blanca, 1 cebolla, 2 zanahorias medianas o grandes, una manzana golden, pasas, azúcar, mayonesa, mostaza de Dijon, zumo de medio limón o  un chorrito de vinagre, sal y pimienta.

Cortamos finamente a cuchillo y en crudo, la col, la zanahoria, la manzana y la cebolla, ponemos en un bol y reservamos. También puedes usar ese complemento de la batidora que te deja todo cortado finísimo en 10 segundos, yo no lo tengo, así que me lo tomo con calma.

Para la salsa mezclamos los ingredientes en un bol y los añadimos luego a la ensalada, mezclamos y dejamos reposar tapado con papel film en la nevera durante 4 horas, cada hora vamos  escurriendo el caldo que suelta y volvemos a remover. Este paso es importante.

 Sírvela fresca como acompañamiento de carnes a la plancha o la parrilla, hamburguesas o perritos calientes, sándwiches o fish and chips.  O directamente como relleno de una jacket potato.

Puedes añadir, al gusto, lombarda o piña, por ejemplo, para hacer algunas variaciones más tropicales. O patata cocida en taquitos para hacerla un primer plato consistente.  Y puedes evitar el uso de mayonesa y añadir aceite de oliva y un poco más de vinagre, también riquísima.

Espárragos a la plancha con jamón serrano

Os dejo una idea facilísima y muy rica. Yo la pongo muchas veces como entrante y es un plato muy vistoso.

Necesitamos: un manojo de espárragos trigueros, unas lonchas de jamón serrano, aceite de oliva.

Calienta en la sartén un poco de aceite de oliva y echa los espárragos bien lavados. Fríelos a fuego medio hasta que estén tiernos y al sacarlos ve enrollándolos con las lonchas de jamón. Veras como el jamón comienza inmediatamente a sudar.

Es un plato sencillísimo pero la combinación es perfecta. Veras como lo conviertes en uno de tus habituales en las cenas con tus amigos.

Cómo freír almendras

A veces, hasta en las cosas aparentemente más sencillas hay pequeñas cosas que debes controlar si pretendes un resultado casi perfecto. Por eso es interesante saber cómo freír las almendras bien y cómo quitarles la piel sin dejarnos los dedos en el intento.

Para pelar las almendras, en caso de que las tengas con la piel, tal y como salen de su cascara, debes poner agua a hervir en una cazuela, cuando rompa a hervir echas las almendras, y cuando vuelva a hervir el agua, puedes retirarlas a un escurridor. Ahora la piel se irá fácilmente con solo tocarlas. Déjalas escurrir sobre papel absorbente. Ya están preparadas para freir.

Calienta en una sartén aceite de girasol, digamos que suficiente para cubrir una capa de almendras, no más. Ponlo a fuego medio-bajo y echa las almendras. Ve removiendo poco a poco de vez en cuando. Cuando las almendras empiecen a dorarse ve sacándolas a un plato con papel absorbente con ayuda de la rasera. Añade sal y deja enfriar.

Pásalas a un tarro que cierre bien y tendrás almendras para bastante tiempo.

Yo las voy sacando para acompañar unos quesos, hueva y mojama, o solas con una cerveza.

Pasta con albóndigas de pavo y rúcula.

Os presento uno de los platos de pasta que he descubierto aquí en UK. Es muy rápido y fácil si compras las albóndigas ya preparadas. Si eres de los que prefieren ver de dónde ha salido tu carne picada o quieres probarte a sacar unas albóndigas ricas que podrás sacar luego en muchas recetas diferentes te dejo cómo las hago yo para este plato.

Ingredientes, dos raciones, para hacer las albóndigas de pavo: 1/4 kg de pechuga de pavo picada, 1 diente de ajo, 1/2 cebolla, 1 huevo, 1 cucharada de pan rallado, aceite de oliva, sal, pimienta negra, perejil fresco picado.

Para la pasta:250 gr de espaguetis o similar, 1 hoja de laurel, 100 ml de anta liquida, una bolsa de rúcula fresca,  sal  y aceite.

Poner en un bol la carne de pavo picada, la mitad de una cebolla picada fina, el ajo picadito muy fino, el huevo y el pan rallado. Mezclar, formar unas bolitas pequeñas con la palma de las manos y espolvorearlas con harina.

Calentar el aceite en una cazuela y dorar las albóndigas. Hacerlas a fuego lento durante unos 12 o 15 minutos. Retirar y reservar.

Hervir la pasta en abundante agua a fuego fuerte con sal y un chorrito de aceite y una hoja de perejil. Pasado el tiempo especificado por fabricante escurrir bien y devolver a la cazuela con un chorrito de aceite de oliva. A fuego lento dar unas vueltas a la pasta con la nata y añadir las hojas de rúcula y pimienta al gusto. Cuando las rúcula pierda su frescura añadir las albóndigas y servir a los platos.

Puedes rayar un poco de parmesano antes de probar. Tremendo plato de pasta.

Ensalada de pasta de verano

Os presento uno de los platos más frescos y fáciles para comer en verano.  A mí me soluciona a menudo la comida en el trabajo y también la hemos llevado muchas ocasiones en la nevera en planes de picnic o de playa.

 Aunque yo diga aquí unos ingredientes, es solo una de las infinitas combinaciones que puede hacer con tu pasta favorita. La cosa es daros una idea básica y que la adaptéis a vuestro gusto.

Ingredientes, por cada ración como plato único, 150 gr de pasta (lazos, espirales, caracolas, etc.) una lata de atún (80grs.), 3 anchoas, unas aceitunas negras, pepinillos, 1 pimiento del piquillo, 1 tomate mediano, 1 huevo duro.

Hierve la pasta como siempre con agua abundante a fuego fuerte el tiempo que especifica el fabricante. Saca y escurre bien bajo el grifo con agua fría y pon en un bol grande.

Pon a cocer el huevo en agua  durante 8 minutos.

Mezcla con la pasta los ingredientes.  El atún  entero si es en aceite de oliva y escurrido si no lo es, la anchoa cortada en 4 trozos, las aceitunas en 3 trozos y tomate, pepinillos y huevo duro en daditos.

Mezcla todo y aliña. A mí me gusta añadir aceite de oliva (si el atún no lo llevaba), sal y pimienta, abundante orégano y un poco de tabasco.  

Y otras veces directamente mayonesa en lugar del aceite.

Ensalada de sandia

Receta fresquísima de sandia. Una solución muy buena a ese melón que sale poco dulce.

Ingredientes: para 4 raciones. 6 tajadas melón de agua o sandia, 1 cebolla roja, pipas peladas tostadas, 150 gr de queso feta, 1 bolsa de rúcula de 150 gr. Aceite de oliva, vinagre de Módena, sal y pimienta.

Mezclar  todos los componentes en un bol grande. Cortando el melón en daditos y sin pepitas, el queso feta en daditos también, la cebolla en rodajas muy finas, la rúcula bien lavada y escurrida  y añadiendo la cantidad de pipas que guste aderezando luego  a conveniencia.

¿Uso comida ecológica?

Hace tiempo, sobre todo desde que vivo aquí en Londres, que siento curiosidad por conocer más de cerca los productos ecológicos y sus ventajas. ¿Son realmente tan importantes sus beneficios como la diferencia de precio que suponen? Esa es la gran duda. Últimamente la demanda es mayor y se pueden encontrar en más sitios y mejor de precio.

Sabemos que son los vegetales y frutas que no han sido tratados químicamente en su proceso de cultivo. Sin pesticidas ni aceleradores de crecimiento o maduración.

Lo que en principio supone un resultado más sano, de mejor sabor y aroma, y más caro. Por ahora, mucho más caro.

Lo mismo pasa con las carnes ecológicas, animalicos que han tenido una alimentación más natural, sin piensos o con muchos menos de lo habitual, espacio para su expansión y recreo, y sin uso de sustancias que cambien su metabolismo.

Según parece, alrededor de un 50% más de vitaminas y nutrientes viajen en estos productos ecológicos, respecto a los no ecológicos. Contienen menos % de agua (que tantas veces nos llama la atención en la cocina cuando nos inundan una sartén) y se conservan mejor y por más tiempo.

Luego nos ahorraríamos tener que hacer mermelada el día después de comprar una caja de fresas o cerezas con toda la ilusión del mundo.

Aquí en Londres la demanda es grande y va en aumento, en todos los supermercados se encuentran estas secciones de productos ecológicos y algunos de ellos, como Whole Foods o The Co-operative, son exclusivamente ecológicos. Yo no digo que haya que consumir solamente estos productos, como alguna gente que solo es capaz de comer esto y al final tienen verdaderos problemas para comprar o salir fuera a comer, pero es cierto que cuanto más consumamos y demandemos estas calidades, más generalizado se hará su consumo y su producción, más bajos serán los precios y quién sabe, tal vez un día consiga comerme un tomate que sepa a tomate o una naranja como las que me traía mi abuelo de su huerto.

Humus, receta sencilla

Me he animado a hacer humus después de mucho tiempo queriendo probar, y es que como se encuentra en muchos supermercados en Londres y con una calidad alta, de infinitas variedades y a un precio asequible, pues a veces tampoco merece la pena ponerse con ciertas cosas…pero esta vez si, definitivamente mi humus casero no tiene nada que envidiar al que hemos comido de M&S o de Sainsbury´s, los dos que recomiendo.

Es muy sencillo y puedes customizarlo a tu gusto. De momento, la receta para el humus clásico que he preparado es la siguiente:

Ingredientes: 1 bote de garbanzos ya cocidos de 400 gr, un buen chorro de aceite de oliva, un pellizco de sal, el zumo de un limón, media cucharadita de cominos, un pellizco de pimienta negra molida, un diente de ajo, dos cucharadas de leche, una cucharadita de pimentón.

Mete todos los ingredientes en la batidora y bata a máxima potencia hasta que tengas una textura suave y homogénea.

Podemos jugar con el picante añadiendo otro diente de ajo, el pimentón picante en lugar del dulce o una cayena o unas gotas de tabasco, pero eso ya si se quiere hacer para machotes.

De momento, prueba con este que te propongo, que es una versión sencilla del humus griego, y preséntalo con unas zanahorias partidas en juliana para untar, u otras verduras en crudo como pepino, pimiento rojo o verde o unas vainas de guisantes y con unos trozos de pan de pita recién tostado.

Pollo en pebre

Ingredientes para un pollo mediano entero: un pollo troceado, 2 cebollas, 4 hojas de laurel, pimienta, tomillo, nuez moscada, aceite de oliva, sal, 4 dientes de ajo, un vaso de vino blanco. 4 patatas medianas.

Sofríes el pollo troceado en aceite de oliva y lo sacas y reservas.
En ese aceite sofríes la cebolla picada y antes de terminar unos ajos en laminas y unas hojas de laurel enteras.
Añades el agua y el pollo al sofrito anterior para que empiece a hervir.
Añades a todo pimienta molida, sal, tomillo y nuez moscada. Y también un vasito de vino, blanco mejor.

Lo dejas hervir hasta que lo veas tierno.

Para hacer las patatas fritas que lo acompañarán, pela y parte las patatas en daditos, fríelas en abundante aceite a fuego medio al principio y fuerte al final para que queden doraditas.

Preséntalas en una fuente aparte que cada uno se sirva en el momento, porque la salsa las dejará blandas al poco y las queremos crujientes.

 

Prueba y verás porqué es el plato que todos los nietos le pedimos a mi abuela cuando vamos a comer con ella desde hace mucho tiempo.

Ensalada de melón con jamón

Me encanta experimentar con las ensaladas en esta época del año.  Vamos a aprovechar la llegada de los melones a los mercados londinenses para preparar una ensalada muy mediterránea que me quite esta morriña ahora que tengo a toda mi gente en la playa.

Necesitamos: medio melón de piel de sapo, 150 gr de jamón serrano loncheado, aceite de oliva, sal gorda en escamas, 1 limón, unas hojas de albahaca,  vinagre de Módena.

Corta tu melón por la mitad y quita las pepitas con ayuda de una cuchara, con esa misma cuchara ve haciendo bolitas que vas dejando en un plato llano grande. Añade al plato todas las lonchas de jamón sin orden ninguno, a tu antojo.

En el mortero pica las hojas de albahaca con la sal gorda, añade luego el aceite de oliva generosamente y el jugo de medio limón, y echa sobre el melón y el jamón. Remueve bien y termina de decorar tu plato con unas gotas de vinagre de Módena.

Nota: si tuvieras jamón a mano, porque se te han gastado las reservas que tenías que traerte en la maleta o  no me hiciste caso en el anterior paso, puedes prosciutto, el jamón italiano que se encuentra fácilmente aquí en Inglaterra.

Espaguetis con paté

Esta receta es un homenaje a mi primo Edu, que se volvía loco cuando se la hacía entre largas jornadas de estudio o alguna que otra vez al volver de fiesta. Este último dato puede daros una idea de lo fácil y rápida que es.

Ingredientes (para 2 personas): 250 gr de espaguetis, (aunque se puede hacer con otra pasta que te guste) 1 lata de paté de cerdo de 250 gr, sal, pimienta, aceite de oliva, medio limón.

Cuece la pasta como siempre hacemos, a fuego fuerte en agua abundante con un chorrito de aceite y un pellizco de sal. El tiempo, el que especifique el fabricante. Retira y escurre bien y pasa a una ensaladera grande sin que se enfríen. Vacía ahí la lata de paté mientras está la pasta caliente, la ralladura de medio limón y remueve bien que se mezcle todo.

Adereza con un poco de pimienta y orégano y presenta.

Cruasanes de sobrasada con queso y jamón cocido y queso

Esta es otra opción para tomar algo ligero en el trabajo e ir cambiando. Yo los hago a veces también en fin de semana para hacer un buen desayuno-comida.

Necesitas dos cruasanes para cada uno, jamón cocido, una loncha de queso cremoso por cada pieza, sobrasada.

Rellena un cruasán con jamón y queso y el otro con sobrasada y queso. Mete al horno 5 minutos a 150 grados.

Yo los llevo a veces preparados y los meto al horno en la empresa.  Ya me contareis.

Noodles con salsa de soja picante

Ingredientes (para 4 raciones): 250 gr de noodles, 1 lima, 2 dientes de ajo, aceite de oliva, salsa de soja, pimienta, 2 cebolletas pequeñas o spring onions, tabasco o guindilla, una pastilla de concentrado de verduras.

Hierve los noodles a fuego fuerte en agua con un chorro de aceite de oliva y una pastilla de concentrado de caldo de verduras. Mientras, prepara los cuencos con la salsa que los acompañará.

A los 5 minutos, comprueba que están hechos y divídelos en raciones en los cuencos que vamos a preparar como explico a continuación.

En cada uno de los 4 cuencos mezclar: un poco de pimienta molida, cebolleta picadita (spring onions), 2 cucharadas de aceite de oliva, un poco de ajo picado, 3 cucharadas de salsa de soja, un poco de lima exprimida, un poco de tabasco o guindilla picadita (muy poca).

 Echa los noodles directamente de la olla, sin escurrir, y añade una cucharada grande del caldo de verduras de la cocción en cada cuenco. Echa perejil picadito por encima y remueve bien.

Sirve con unos palillos chinos, si te atreves con ellos…

Sándwich de bacon con verduras

Cuando estás obligado a tirar de sándwich o bocadillos a menudo por cuestiones de trabajo hay que variar, a veces hay que hacer un esfuerzo porque lo más fácil es coger dos lonchas de jamón cocido y una de queso, pero merece la pena. Probad este que és muy original y riquísimo. Ligero y puede comerse caliente o del  tiempo.

Ingredientes: 3 lonchas de bacon, calabacín, tomate, cebolla, pimiento verde, mayonesa de mostaza ( o mayonesa sola o las dos por separado).

Corta unas rodajas de calabacín, un cuarto de cebolla picadita, unos taquitos de pimiento verde o rojo, según prefieras, y pon todo a la vez en la sartén a fuego lento con unas gotas de aceite. Cuando el calabacín esté casi hecho añade el bacon, dale dos vueltas para que se haga bien y retira todo del fuego. Sirve en el pan de molde y añadeunas rodajas de tomate.  Unta con mayonesa de mostaza y listo.

Si estás en casa puedes acompañarlo de unas patatas fritas y darte un homenaje.

Desayuno inglés

Ya me había hecho algún desayuno inglés en casa los fines de semana, pero ha sido ahora, con la visita de mis tíos de Murcia, cuando he tenido que esforzarme para demostrar que aquí no pasamos hambre y que le cuenten a la abuela que me cuido bien, que no sufra.

Agradezco el interés de la gente que viaja a un sitio y se adapta a las costumbre culinarias de sus gentes. Si aquí le pegan al bacon, las salchichas y los huevos, pues qué le vamos a hacer…andamos luego un poco y lo quemamos.

En cualquier pub inglés que se precie y en la mayoría de las cafeterías puedes encontrar este desayuno inglés típico y algunas de sus variantes. No están mal de precio y te permiten hacer vida hasta cena. A mí me gusta.

Ingredientes, por persona: 2 huevos, 2 salchichas de cerdo, 2 lonchas de bacon, 1 tomate, 5 champiñones frescos, 2 rebanadas de pan de molde, 2 cucharadas soperas (alrededor de 100 gr.) de judías con tomate, sus famosas “beans”. Aceite de oliva, sal y vinagre.

Los huevos los vamos a hacer escalfados (aunque se pueden hacer revueltos): Echa el huevo en un cuenco con cuidado, que no se rompa. Pon agua a hervir en un cazo con un buen chorro de vinagre, para que el huevo quede cerrado,  y sin sal, que provoca el efecto contrario. Cuando el agua esté hirviendo aparta del fuego el cazo y echa el huevo desde el cuenco y metiendo el cuenco en el cazo, sin dejarlo caer que no se rompa. Tapa el cazo y deja unos 3 o 4 minutos (fuera del fuego). Retíralo con la espumadera y repite la operación con el otro huevo.

En una sartén tostamos las tostadas con un poco de mantequilla untada previamente.

Luego hacemos los champiñones  bien limpios y lamiados y el tomate cortado en cuartos. Se hacen a la plancha con un chorrito de aceite, muy poco, sal y en 5 minutos. Las salchichas y el bacon pasarán por último por la sartén con un chorrito de aceite de oliva.

Calienta al final las beans en un cuenco en el microondas y sirve junto a todo lo demás en un plato grande  una fuente llana, uno por comensal.

Presenta caliente, junto a las tostadas, y deja sal y pimienta para aliñar.

Dependiendo de la hora el plato te pedirá más una cerveza que un café o un té…allá cada uno.

Té helado

Vamos a procurar sustituir algunos de los tantos refrescos que tomamos durante el verano por algo más sano y con un toque inglés. Una buena jarra de té helado.

Necesitas: 4 bolsas del té que más te guste, bastante hielo, 1 litro de agua, unas hojas de menta, azúcar, una naranja o mandarina y una lima.

Calienta 1 litro de agua en el kettle, si no tienes usa un cazo grande. Cuando rompa a hervir echa el agua en una jarra grande y pon 4 bolsas de té, el que más te guste. Añade 3 cucharadas de azúcar,  la piel de una naranja o una mandarina y la piel de una lima (usa el pelador para esto). Deja 3 minutos y retira las bolsitas de té. Añade bastantes hielos y unas hojas de menta y remueve.

Listo para tomar y fresco fresco. Especial para el verano.

 

Mayonesa de mostaza

Ante tanto partido de Eurocopa y sus respectivos picoteos con los amigos: sándwiches, bocatas, patatas fritas o asadas, nachos, etc.  me he probado a hacer esta mayonesa de mostaza ideal para acompañar todos estos platos.

Es igual de fácil que una mayonesa normal y das un toque original a tus ensaladas verdes, o de arroz, o de pasta, a esas pechugas a la plancha o a una carne a la brasa, una hamburguesa o un pescado al horno…las posibilidades son infinitas.

Qué necesitas: 1 huevo, 2 cucharaditas de mostaza de Dijon, un pellizco de sal, pimienta molida, una cucharada de vinagre blanco de uva, 300 ml de aceite de girasol.

Echa en el recipiente de la batidora el huevo, el vinagre, la sal, un poco de pimienta molida, las 2 cucharaditas de mostaza y los 300 ml de aceite de girasol. Mete la batidora y deposítala en el fondo del recipiente completamente plana, procura que no se mueva durante el primer minuto al batir. Bate a velocidad alta y sin mover la batidora del fondo durante un minuto. Cuando veas que ha cuajado ve subiendo poco a poco la batidora y termina de cuajarla.

Puedes cambiar  la densidad de la mayonesa a tu gusto según modifiques la cantidad de aceite.

Igual que puedes cambiar su intensidad combinando el aceite de girasol con el de oliva. Pero ten en cuenta que éste último es muy intenso, notarás el cambio sólo que añadir dos cucharadas soperas a tu mayonesa de mostaza.

En la foto con unas patatas asadas, pero seguro que encontrais muchos platos que se pueden acompañar con la mayonesa de mostaza.

Ya sabes que si se te cortara la mayonesa, cosa que puede pasarte sobre todo si no controlas los instrumentos de trabajo o si es tu primera vez, hay una solución muy fácil.

Noodles con verduras

Aprovechando que tengo en el supermercado habitual un pasillo de comidas del mundo y que una de las cosas que hay que probar cuando vienes a Londres es meterse en un supermercado exclusivamente para chinos en Soho a entenderse con ellos y comprar algunos de sus productos (la salsa de soja, por ejemplo, es muchísimo más barata) os propongo hoy probar unos noodles con verduras.

Es un plato muy sencillo de hacer y sanísimo. El precio no llega a 1€ por ración y lo puedes comer de táper en la empresa en caliente o a temperatura ambiente.

Prueba a hacerlos, verás como repites:

Necesitas: 250 gr de noodles, 2 zanahorias, 1 pimiento rojo,1 bolsa de brotes de soja (200 gr), champiñones o setas, 1 cebolla, 3 dientes de ajo, aceite de oliva, sal.

 Cocemos los noodles como indica el fabricante, pasamos por agua fría y reservamos escurriendo.

Pochamos en el wok, con un poquito de aceite de oliva, la cebolla picada con los 3 dientes de ajo sin pelar ni partir. Añadimos, cuando la cebolla esté cambiando a marroncita, la zanahoria muy picada, los champis cortados en laminas y el pimiento rojo en dados pequeños. Salpimienta y da unas vueltas de vez en cuando. Cuando esté la verdura hecha, a tu gusto, según prefieras más o menos entera, añade la bolsa de brotes de soja y los noodles y da unas vueltas en el wok durante 5 minutos.

Retira del fuego y presenta calientes con un poco de orégano y un chorrito de aceite de oliva.

Ya veis que la receta es sanísima, contiene una bolsa entera de brotes de soja (mejora la flora intestinal) verduras cocinadas en el wok ( muy pocas calorías porque se hacen con muy poco aceite) y aceite de oliva en crudo.  Operación “en Londres no hay playa pero me cuido por si me quito la camiseta en un parque cuando deje de llover y pasemos de 20 grados”

Revuelto de verduras

Este es otro de los platos típicos murcianos que estoy haciendo famoso aquí en Londres, un revuelto de verduras. Muy sencillo de hacer, flexible en cuanto a los ingredientes se refiere, pues puedes utilizar aquellas verduras que más te gusten o encuentres según temporada.  Es un plato ligero, ideal para comer en el trabajo.

Necesitas (para 4 raciones): un manojo de espárragos (250 gr), 250 gr de champiñones, unos ajos tiernos, 200 gr de judías verdes, 100 gr de guisantes.

Como dije antes, puedes sustituir algunas verduras y usar las que tengas a mano, por ejemplo, a mí me gusta añadir calabacín, como se hace en Murcia, y otras veces pongo brócoli, coliflor,  zanahoria o maíz. Igualmente, y por comodidad, estoy utilizando algunas veces las judías y los guisantes congelados y salen buenos. De esta manera siempre tengo en casa.

Lava toda la verdura, lo primero. Quita el tallo a los ajos tiernos y corta los espárragos en trozos (por ejemplo cada uno en 6) y retira su parte más dura. Pon espárragos y ajos tiernos en una sartén con un poco de aceite de oliva a fuego lento durante 10 minutos. Añade entonces las judías verdes partidas por la mitad y sin las puntas. Echa un poco de sal. Deja 5 minutos y añade entonces los champiñones cortados en láminas. Fríe todo junto a fuego algo más fuerte hasta que los champiñones suelten y pierdan toda el agua y queden hechos.

Baja el fuego. Ponlo flojo. Echa entonces 6 huevos a la sartén y remueve poco a poco rompiendo las yemas y mezclando todo en la sartén. Cuando el huevo este hecho retira y presenta con unas rebanadas de pan tostado.

Si quieres dar más consistencia al plato puedes añadir unas gambas peladas pasadas antes por la sartén o unos trozos de bacon, también fritos antes. Ya el nombre de Revuelto de verduras se le queda un poco corto, pero bueno, va a estar cojonudo igualmente.

Asado de lubina o dorada

  Ya he hablado otras veces de la importancia que tiene encontrar algunos platos de pescado que podamos ir cocinando con ciertas garantías allí donde estemos residiendo con la intención de tener una dieta equilibrada y rica.

 Aquí la oferta de pescado es sorprendentemente pobre. Mucho salmón fresco, bacalao congelado y precocinado, y todo tipo de barritas de pescado que no he llegado a identificar todavía. A veces tenemos la posibilidad de comprar dorada o lubina fresca. Vienen pre embasadas y parecen bastante frescas en comparación a lo que he visto en algún puesto en mercados o incluso en pescaderías.

Ingredientes: 2 lubinas o 2 doradas, 2 patatas, 1 cebolla, 1 tomate, aceite de oliva, medio vasito de vino blanco (opcional), sal, pimienta, limón, perejil.

Unta de forma generosa la bandeja del horno con aceite de oliva. Puedes poner antes una lámina de papel para horno, así se ensucia menos la bandeja y no se pega nada. Pon las patatas cortadas en láminas finas y la cebolla encima. Coloca el tomate partido en cuartos. Salpimienta y añade un poco de perejil picado si te gusta.
 Mete al horno a 220 ºC hasta que estén casi hechas (unos 30 minutos). Saca la bandeja y coloca encima de las patatas el pescado, abierto y bien limpio. Añade algo de sal y unas rodajitas finas de limón. Un poco de aceite de oliva, perejil picadito y un poco de vino blanco (puedes no echarle, según quieras más o menos jugo).
Volver a meter la bandeja al horno a 220 ºC 20 minutos justos si las piezas son de ración (alrededor de 300 grs)
Sacar y servir el pescado junto a las patatas.
  Se puede comer con mayonesa o con ajo, según apetezca y proceda por la compañía y los compromisos posteriores.

Plato muy fácil de hacer y sanísimo. Puede llevarse perfectamente en el táper para comer en el trabajo y es ligero, para trabajar después sin bostezar.

Pasta con chorizo

Aunque en UK es difícil encontrar un chorizo bueno, sí que es fácil encontrar en cualquier supermercado chorizo para cocinar. Así que he añadido a mis recetas para táper este de pasta con chorizo y queso rallado. Sale buenísima y muy sencilla.

Ingredientes (para 2 raciones): 200 gr de chorizo en taquitos, 250 gr de pasta, 1 cebolla, queso rallado, aceite de oliva, sal y orégano.

Cuece la pasta en una cacerola con abundante agua hirviendo a fuego fuerte, con un poco de sal y un chorrito de aceite. Aparta cuando pase el tiempo que especifique el fabricante y reserva.

Corta el chorizo en taquitos y dale una vuelta en la sartén 3 minutos con un chorrito de aceite de oliva, retira y añade la cebolla picadita, se hará en ese mismo aceite en el que hiciste el chorizo. Retira cuando esté marroncita.

Mezcla todo en una bandeja para horno, echa orégano por encima y queso rallado. Mete al horno y pon el grill 5 minutos hasta que se funda el queso.  Toma caliente.

Si vas a llevarlo en el táper, añade el queso y guarda en el frigo. Antes de tomar, vuelca en un plato y dale unos minutos de grill en el horno o en el microondas antes de comer.

En esta otra ocasión elegí como pasta unos tortellini rellenos de espinacas, que conjugan perfectamente con el chorizo. Una buena opción es que sean rellenos de parmesano, también muy jugosos.