lunes, 28 de noviembre de 2011

A medio día, sandwich

Los primeros días aquí buscando piso, si no te alojas en casa de alguien, son horribles para el tema de salvar las comidas. Olvídate de algo caliente, y haz verdaderos esfuerzos para no hincharte a patatas fritas de bolsa, sándwich preparados y bollería, que es lo fácil y barato.

Así que subsistimos a base de pan de molde con cereales, jamón york, queso en lonchas y espinacas de bolsa. Me gustaban bastante y he tomado esta combinación como la base imprescindible de cualquier sándwich que me haga.
El que más repito ahora incluye tortilla francesa, hecha con generoso aceite de oliva, para que sude el pan y quede meloso. Y le añado una salsa de tomate y chili bastante picante que descubrí a un compañero en el trabajo.
Según vaya haciendo probaturas sobre esta base que he bautizado como indispensable las iré haciendo públicas, pues no sé vosotros, pero aquí come sándwich a medio día hasta la Kate Middleton .

2 comentarios:

  1. Esto me interesa. Por salud tengo que comer algo sobre las 12 de la mañana... por salud y por hambre. Ahora tengo en un cajon de mi mesa galletas y zumos, pero no se si me veo sacandome un sandwich del cajon y danlole caza, pero me veo capaz de hacer la prueba. Ya veremos el combo espinacas, york y queso ese que dices a que sabe.
    La salsa esa... lo mismo me la salto.

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  2. Claro, es más completo y te permite comer más ligero luego. A media mañana es perfecto, es cuando más energía necesitas. Toma la pieza de fruta, la galleta o el zumo ammedia tarde.
    Añade a tu sandwich unas rodajas de tomate y/o un huevo duro en rodajas. Sano y rico.
    Y lo puedes hacer la noche anterior. Fácil

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