Compramos el otro día una caja de fresas en el mercado con una pinta buenísima y al día siguiente estaban muy maduras. El tío de ése puesto me la juega siempre con alguna de las cosas que me llevo…Solución: mermelada de fresas.
Necesitas: 1 Kg de fresas, 800 gr de azúcar, el zumo
de medio limón y una tacita de agua (que puede omitirse si la fresa está muy
madura)
Limpia y lava las fresas, échalas en un cazo mediano, añade
el zumo del limón y el agua, si fuera necesaria, y pasa por la batidora 15
segundos, un poco, sólo para romper las fresas, no para triturar. Añade el azúcar
entonces y pon a fuego lento hasta que se evapore el agua suficiente para que
tenga la textura deseada. No hace falta que remuevas mucho, sólo ve revisando
que no se pegue y la textura que queda. Serán unos 45 minutos más o menos.
Recuerda que al enfriar quedará algo más densa. Y si quieres
comprobarla puedes sacar una cucharadita a un plato y ver cómo quedará.
Guarda en un bote de cristal de alguna cosa que ya hayas
gastado. Como presumiblemente la vas a consumir en poco tiempo, porque tampoco
es mucha cantidad, no hará falta que esterilices los botes ni cierres al vacío.
Simplemente disfruta tu mermelada de fresa en todas
las posibilidades que ofrece: con yogurt natural, con helado, con queso fresco
o curado, con fruta, en tostadas o en tartas.
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